El 94 % de las personas receptoras dijeron que se sentían más calmados y tanto los receptores lo experimentaban por primera vez como los receptores habituales, expresaron sensaciones de estar "físicamente más ágiles", "más energéticos", "más equilibrados".
Cerca del 60% de los receptores pudieron dormir mejor después del Shiatsu.
Durante esta investigación, que duró 6 meses, los síntomas de las personas participantes se redujeron significativamente y estas mejorías se mantenían en el tiempo.
Al final del estudio cerca de 89% de los receptores afirmaron que el Shiatsu había sido efectivo en el tratamiento de sus síntomas.
Los síntomas que más mejoran son la tensión y el estrés seguidos de los probemas musculares, de estructura general como el dolor de espalda y en las articulaciones, baja energía y cansancio, así como problemas de digestión, la menstruación y la respiración.
Más del 90% de los receptores opinaron que el Shiatsu les había ayudado a mantener la salud. Tanto los nuevos usuarios como los habituales se sentían más conscientes de sí mismos, con más confianza en sus capacidades y más conectados a sus emociones.
Después de tan solo 3 meses de recibiendo Shiatsu, todas las personas expresaron "más confianza en que mis problemas puedan ser superados".
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